"La mayoría de las noticias que aparecen en la TV asocia a los jóvenes con hechos violentos”. Ésta es la conclusión que presenta la nota de Carlos Rodríguez aparecida en el diario Página 12, en su edición del sábado 29 de octubre de 2011. A partir de este informe, es bueno también preguntarnos cuál es nuestra mirada hacia los jóvenes, y qué cuestiones abordamos cuando hablamos de ellos.
En la televisión argentina se habla poco de niños, niñas y adolescentes –apenas el 12,4 por ciento de los títulos se ocupa de ellos–, pero lo más grave es que “cuatro de cada diez notas” sobre infancia y juventud (el 43,2 por ciento) se refieren “a temas vinculados con la violencia”, según un informe realizado en conjunto por el Capítulo Infancia de la Asociación Civil Periodismo Social y el Observatorio de la Televisión de la Universidad Austral.
Ese 43,2 por ciento de la TV prácticamente duplica el 25 por ciento que le dedican al mismo tema los medios gráficos. El noticiero de TV que más espacio les brinda a los temas relacionados con niñez y violencia es América Noticias: el 54,5 por ciento de las notas tiene que ver con ese tipo de hechos. Le siguen en orden descendente Telefe y Telenueve (50 por ciento) y Telenoche (45). Es notable la diferencia de los cuatro canales privados (13, 11, 9 y 2), con lo que ocurre con el noticiero Visión Siete, de la Televisión Pública, que sólo destina el 20 por ciento de las noticias a ese tipo de temas.
El seguimiento de los cinco noticieros de la TV abierta se hizo mediante la observación de las emisiones realizadas durante los meses de septiembre, octubre y noviembre del año 2010, en el horario central de 19 a 21. Se analizaron más de 600 noticias en más de 20 categorías distintas. Se destaca en el informe que ese gran caudal de información se produjo a pesar de que en el período señalado “no se registraron casos policiales resonantes” protagonizados por chicos que “hayan conmocionado a la opinión pública y acaparado la agenda mediática con el debate sobre bajar o no la edad de imputabilidad, como sí ocurrió en enero de 2011 con el asesinato de un hombre, en La Plata, a manos de un adolescente”.
De todos modos, tuvieron gran difusión entre septiembre y noviembre hechos delictivos como “asaltos o intentos de secuestros”, al igual que “incidentes por el día de la primavera y peleas estudiantiles” en establecimientos educativos de todo el país.
Un dato central que se cuestiona es que sólo un 6,2 por ciento de los informes especiales sobre violencia presentados al público contaron con “una información más contextualizada, con diferentes voces, estadísticas, citas de legislación y análisis de políticas públicas”. El resto, la inmensa mayoría (el 78,1 por ciento), son crónicas que informan “sobre un hecho puntual, generalmente ocurrido en las horas anteriores y que desaparece de la agencia mediática al otro día o poco después de ocurrido el hecho que se informa”.
El 12,4 por ciento de la agenda televisiva que se asigna a los chicos es considerada muy baja “para dar cuenta de la realidad de los casi 15 millones de personas menores de 18 años que viven en el país”. Además, el tema de la violencia, con su 43,2 por ciento, desplaza a segundos planos a cuestiones como Educación (21,6 por ciento), Salud (13,5), Cultura (5,4) y Accidentes (5,4 por ciento). Esto lleva a que estén “invisibilizados” temas como Discapacidad y Pobreza (1,3 por ciento cada uno), mientras que en el período analizado casi no fueron abordadas cuestiones como Trabajo Infantil, Adicciones y Acceso a la Tecnología.
Uno de los pocos datos positivos de la investigación es que “niños, niñas y adolescentes son las fuentes más escuchadas en los noticieros analizados, contrariamente a lo que ocurre en los diarios” cuando se tratan temas de niñez y adolescencia.
El informe define algunos puntos centrales para el análisis de la calidad informativa en temas de violencia: en la cobertura de las noticias, “casi el 92 por ciento de las notas no usa estadísticas, más del 90 por ciento no cita legislación de ningún tipo (general o específica de la infancia), y como indicadores positivos, la mayoría respeta el derecho a la intimidad y a la identidad de los chicos y chicas (en el 78,3 y en el 86,4 de los casos respectivamente)”.
Fuentes: http://donbosco.org.ar y Página/12
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