En el marco de un conflicto que se extiende desde hace un año y medio, los Abramovich, dueños de la hilandería, no aparecen por la
planta y los
atrasos salariales en esta oportunidad ascienden a más de cuatro meses. La Comisión Interna advierte
que desde hace largo tiempo la producción no llega a los niveles
normales y
que la intención de la patronal es abandonar definitivamente la firma. Los obreros permanecen ocupando la fábrica. De no encontrar solución a
sus reclamos, los trabajadores evaluán profundizar las medidas. La
planta quilmeña, entre quincenales y mensuales, cuenta con más de un
centenar de empleados. Desde el Movimiento SUTEBA Unido manifestamos nuestra solidaridad con los trabajadores en lucha, junto a los cuales nos hemos hecho presentes en reiteradas oportunidades a lo largo de esta lucha por la defensa de los puestos de trabajo.
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